| E l n a c i m i e n t o d e l h u e v o |
Los ángeles
detestan la mezcla entre razas. Por ello iniciaron la tradición de “El
nacimiento del huevo” que consiste en tener a todos los bebés en un lugar
especial, separados de sus padres hasta que cumplen los 4 años, que es cuando
les crecen las alas. Son criados con mimo y cariño, enseñandolos a odiar el mestizaje y sus radicales ideas.
El día de su
cumpleaños, los niños son metidos en un huevo de oro incrustado de piedras
preciosas mágicas. El huevo detecta el despertar de las alas y se abre. Si el
niño tiene las alas blancas, es puro y puede vivir con su familia.
Por el
contrario, si tiene las alas manchadas de rojo o negras significa que es
mestizo. Inmediatamente les cortan las alas y los tiran al vacío. Como el
castillo de los ángeles está situado en los cielos, la caída es mortal. La madre es apresada de por vida.
Puede
ocurrir que las alas no salgan. Si eso ocurre y su cumpleaños ha pasado
significa que es mestizo de humano y lo tiran igualmente.
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